domingo, 29 de mayo de 2016

Ho'oponopono

La felicidad y el bienestar que estas buscando está detrás del arte del “Hoʻoponopono”.
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Ho'oponopono es un arte hawaiano muy antiguo, traído y actualizado para estos tiempos por Mornah Nalamaku Simeona (1913-1992). La versión de Mornah está influenciada por su educación: cristiana, protestante y católica, y por sus estudios filosóficos sobre la India, China y Edgar Cayce.
Al igual que en las tradiciones hawaianas ella dio gran importancia a la oración, pero también incluye la creencia del karma, pensaba que las personas tienen que experimentar por uno mismo lo que le hemos hecho a otros, donde uno es el creador de su vida y de sus circunstancias, por lo que el objetivo de Mornah era la limpieza kármica, liberarnos de experiencias infelices y negativas mediante una transformación por medio de la oración altruista que alcanzan el plano divino gracias a sus altas vibraciones, donde los problemas pierden la energía para efectos físicos y la sanación y el equilibrio comienzan.
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Esta es la oración de Mornah, es un proceso simple pero poderoso:
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"Divino Creador, Madre, Hijo, todos en uno. Si yo, mi familia, mis parientes y antepasados ofendimos a tu familia, parientes y antepasados en pensamientos, palabras, hechos y acciones desde el inicio de nuestra Creación hasta el presente, nosotros te pedimos perdón.
Deja que esto se limpie, purifique, libere, corte todas las memorias, bloqueos, energías, vibraciones negativas… transmuta estas energías en pura Luz… Así sea y hecho esta".
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"Cuando la frase "así sea" es usada después de una oración, quiere decir que el trabajo del hombre termina y comienza el de Dios"
Mornah Nalamaku Simeona​
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Después de que Mornah falleciera, su estudiante Ihalekala Hew Len escribió un libro junto con Joe Vitale llamado "Cero Límites" (Zero Limits), donde hablaba de las enseñanzas de Mornah, pero plantean en contraste que uno debe de repetir constantemente el mantra: "Lo siento. Por favor, perdóname. Te amo. Gracias". Basándose en el principio de cien por ciento de responsabilidad, es decir, tomar la responsabilidad de las acciones de otros, no sólo de las propias.
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"Si uno fuera a tomar completa responsabilidad por su propia vida, entonces todo lo que uno vea, escuche, saboree, toque, o experimente de cualquier forma sería nuestra propia responsabilidad, porque está presente en nuestra propia vida".
Joe Vitale​
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La responsabilidad total significa entonces que todo existe como una proyección desde adentro del ser humano y para cambiar nuestra realidad entonces necesitamos cambiarnos a nosotros mismos. Viendo a todas las consciencias como parte de un todo, por lo que cualquier error que sea limpiado en la propia consciencia se limpia así para todos.
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Todas las personas que aparecen en nuestras vidas y las situaciones, sean propias o ajenas (si es que así que lo creemos) nos dan la oportunidad de tomar la responsabilidad del cien por ciento, y decidir decir: "Lo siento. Perdóname por aquello que está en mí que ha creado esto". Esto es "Hoʻoponopono".
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El asumir el cien por ciento de nuestra responsabilidad es el camino más corto, dejamos de culpar a otros y a lo externo de nuestros propios sentimientos negativos y de nuestras circunstancias que no nos gustan, sentimientos como el odio, el enojo… que nos condenan y atan, y podemos liberarnos a través del perdón. Porque el perdón es la esencia de este camino más corto y más fácil, y no es necesario hablar con nadie, o informar a alguien de que se le ha perdonado, porque este es un trabajo interno. Es un proceso que se da entre nosotros y Dios cuando decimos: "Divino Creador, perdóname por aquello que está en mi que ha creado esto". Ser responsable del cien por ciento es saber que "esto lo estoy creando yo, que es mi percepción en base a mis pensamientos y que también yo puedo borrarlo". Es un proceso donde ya no espero que el otro cambie, o que reaccione de una forma determinada o haga algo, es un proceso interno mío que sólo depende de mí.
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La felicidad que buscamos en nuestras relaciones, en los amigos, en nuestra salud, en la economía, en la prosperidad y la abundancia, en nuestro bienestar, en nuestra alegría, en nuestra pareja… está detrás de cada GRACIAS y de cada TE AMO. Esta a través de cada PERDÓN que damos a otros y a nosotros mismos y que nos permite liberar: temores, dudas, opiniones, juicios, carencias, odio… Agradece cada vez que aparece algo negativo, porque te da la oportunidad de soltarlo. "Hoʻoponopono" es tomar cien por ciento de tu realidad y le damos permiso a Dios para que nos tome de la mano, nos guíe y nos proteja. Con "Hoʻoponopono" no hay pensamientos, ni culpas, nos convertimos en un canal para canalizar la inspiración abierto a la energía del universo y cuando nos encontramos en ese lugar estamos siendo guiados y protegidos, y es donde los milagros ocurren.
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"Lo siento. Por favor, perdóname. T​e amo. Gracias".

Con corazón Gaby Ichel

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